Celebración de fin de año y Terra Madre Day en Pachacamac

El domingo 16 de diciembre, el grupo de Slow Food en Lima se reunió en la chacra agroecológica La Lagunita de Celia Ramos en Pachacámac para celebrar el Terra Madre Day y conmemorar las actividades del presente año. Más de 30 personas de edades, distritos y ocupaciones diversas se encontraron para visitar la chacra, conocer mejor el movimiento Slow Food y disfrutar una auténtica pachamanca.

Celia Ramos, participante de la Comunidad de Soporte para Agricultores Jóvenes impulsada por Slow Food en Perú y la Red de Agricultura Ecológica, dio la bienvenida al grupo y explicó el funcionamiento de La Lagunita, chacra agroecológica en Manchay que produce hortalizas y frutas para el comercio, así como carne de oveja y huevos para el autoconsumo.

Para ilustrar las prácticas agroecológicas aplicadas en la chacra, se hizo un recorrido para mostrar la diversidad de cultivos y de técnicas amigables con el medioambiente. Partiendo de la laguna de agua de manantial que sirve para la irrigación de los cultivos, se explicó la elaboración del compost, abono ecológico elaborado con residuos vegetales. Tras ello, el grupo se acercó a las ovejas y captó su rol en la generación de estiércol, otro valioso insumo para enriquecer el suelo. Estos ovinos son, además, una fuente de carne saludable para la familia de estos agricultores.

Luego, se explicó la importancia de diversificar y asociar los cultivos de hortalizas, tubérculos y frutas para fomentar la acción complementaria entre diferentes especies. Por ejemplo, al sembrar fresas junto a yucas, cebollas y ajos, se obtiene sombra de las hojas de yuca y protección contra las plagas gracias al olor de los bulbos. En las dos hectáreas de cultivo también se apreciaron pallares, zapallos, lechugas, arúgula, hierbas aromáticas, hinojo, apio, brócoli, col, plátano, frambuesas, palta y lúcuma.

Tras la visita a los campos, todos participamos de la preparación de la pachamanca bajo la dirección de Frank Málaga, cocinero de Slow Food. Para elaborar este plato tradicional, calentamos piedras en brasas dentro de un hoyo. Luego, dispusimos papas y camotes por capas, carne marinada de cordero y pollo, y vegetales como habas, frijoles, zanahorias, cebollas, espárragos y hierbas aromáticas. Finalmente, tapamos la pachamanca con hojas de banano y tierra, cuidando el sellado para evitar el escape del calor. En ese horno al vapor, los alimentos se cocinaron lentamente, con lo cual sus aromas y sabores se fundieron e intensificaron.

Fue un evento “cero residuos”, en donde cada participante llevó su propio plato, cubiertos y vasos para luchar contra la generación de residuos.

Durante el almuerzo, Oriane Brunet y Karla Gabaldoni, coordinadoras de la red Slow Food en Perú, presentaron los principios y las principales campañas de este movimiento internacional, como “Comida para el Cambio”. Del Perú, se resaltó el proyecto de la Comunidad de Soporte para Agricultores Jóvenes, cuyo objetivo es desarrollar las habilidades de los agricultores jóvenes responsables y vincularlos con potenciales clientes y profesionales para impulsar sus negocios.

Terminamos el día con la emoción de ser una red cada vez más grande, compuesta de personas con muchos conocimientos y habilidades, todas vinculadas al campo y la nutrición de una manera muy personal, y llenas de ganas de mejorar el acceso a la alimentación buena, limpia y justa para todos.

A partir del lunes 14 de enero del 2019, se lanzará el Café Slow Food en Las Vecinas –situado en Barranco–, el cual se llevará el segundo lunes de cada mes de 6pm a 8pm para seguir conociéndonos.

Y para disfrutar los mejores productos sostenibles, compren directamente a los agricultores jóvenes:

  • La Lagunita de Celia Ramos – hortalizas, frutas y huevos orgánicos de Pachacámac: en la bioferia de Reducto en Miraflores los sábados (stand Biofresas); por delivery: 994 760 526.

  • Rico Pato de Dionisio Gonzáles – patos beneficiados de Lurín: 963 171 981.

Escrito por Oriane Brunet.